Una recicladora con sede de operaciones en la Zona Norte de la ciudad de Tijuana, fue clausurada por el ayuntamiento de la ciudad a través de la Dirección de Inspección y Verificación, por incumplimiento de normas ambientales, medidas de seguridad, así como no contar con permisos municipales.
En atención a una denuncia, se constató que el centro de acopio operaba fuera de la legalidad, según comentó el director de Inspección y Verificación Municipal, José Antonio Olivas Heredia.
Se verificó que el inmueble no cumplía con las regulaciones y normas ambientales, según el reglamento municipal, pues tenía material acumulado en bolsas sobre el suelo con contenido de botes de aluminio, alambres, plástico, cableado y partes de electrónicos.
Por otro lado, no contaba con los permisos ni licencias municipales requeridos para su funcionamiento, lo que contraviene la Normatividad Municipal de Operación Mercantil, además de tener nulas condiciones de higiene, malos olores; así como cielos y muros en mal estado.
Cabe resaltar que tampoco se localizaron dispositivos y medidas de seguridad, como señalética, lámparas de emergencia y detector de humo, así como los extintores se encontraban obstruidos.
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